
La juez Local Penal de Juigalpa, Chontales, Sandra Tablada Mena, informó que los dos médicos y la enfermera acusados por el Ministerio Público por los delitos de homicidio imprudente en perjuicio de Mabel Elieth Álvarez Díaz y lesiones gravísimas en su bebé Pablo Alberto Barrera Álvarez enfrentarán juicio oral y público el próximo 24 de septiembre.
Tablada dijo que antes de la acusación de la Fiscalía se presentó una acusación particular contra siete personas del Hospital Escuela Asunción de Juigalpa.
No obstante, la acusación no fue admitida por no llenar los requisitos, debido a que no fue individualizada la actitud y conducta de cada médico o enfermera.
Indicó que la acusación de la Fiscalía contra los doctores José Benito Flores y Pedro Rafael Miranda Castillo, y la enfermera Alejandra Vásquez, fue admitida en audiencia del 13 de julio pasado.
“Se estudió el caso y llenaba los requisitos establecidos en el artículo 77, con una relación clara precisa, circunstanciada, se indica tiempo, modo, lugar y la participación de cada uno de los acusados”, precisó Tablada.
Explicó que también “se dio el intercambio de información y pruebas, y en juicio oral y público se va a determinar si hay o no responsabilidad”.
Tablada dijo que tras señalar el día del juicio, la defensa técnica, representada por el abogado Julio Abaunza, solicitó una audiencia especial para dilucidar el hecho de considerar que están dejando en la indefensión a sus representados por no contar con el expediente médico.
En ese sentido dijo que la defensa solicita que se le facilite el expediente médico, “el cual tengo entendido está en manos del Silais y del Ministerio Público, que son medios de prueba, yo no puedo ordenar que se entregue copia a la defensa”, aclaró Tablada.
Según la acusación presentada por el fiscal Maykel Iván Robleto, a través de pruebas testimoniales y periciales, demostrará que los dos médicos y una enfermera presuntamente “violaron la normativa del protocolo de hemorragia posparto”, causando en la joven mujer desgarros múltiples y hemorragia posparto, además trauma obstetra al neonato, que le provocó asfixia neonatal.
El primero de diciembre del 2012, Mabel Elieth Álvarez Díaz, de 29 años, fue transferida del Centro de Salud de Santo Tomás hacia el Hospital Escuela Asunción, de Juigalpa, donde supuestamente fue obligada a parir en la sala de expulsión y después intervenida, falleciendo por un “shock hipovolémico refractario”, mientras el bebé sufrió “asfixia neonatal severa” que le dejó daños irreversibles.
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